jueves, 26 de mayo de 2011

CENIZAS AL VIENTO



En estos últimos días, cuando la vida me volvió a empujar contra la pared, entrompándome con la muerte, la poesía de Bob Dylan se me hizo más viva.

Hacía tiempo que, por la situación de Venezuela, la lírica de la canción “Soplos al viento” (‘Blowing in the wind’), se mantenía latiéndome en la cabeza.

Sus líneas, premonitorias en mi caso, transcurrían en un ‘corsi e ricorsi’ insistente, asediándome con sus preguntas, recordándome que la genialidad de su autor las mantenía vigentes, a más de 40 años de haber sido escritas.

Insistía en una estrofa:

“Sí, ¿y cuánto tiempo tiene un hombre
que mirar hacia arriba
antes de que pueda ver el cielo?

Sí, ¿y cuántos oídos tiene que tener un hombre
para que pueda escuchar a la gente gritar?

Sí, ¿y cuántas muertes se aceptarán,
hasta que se sepa
que ya ha muerto demasiada gente?

La respuesta, amigo mío,
está soplando en el viento,
la respuesta está soplando en el viento”

Era como si me hubiese preparado el camino para lo que después viviría.

Con la intención de escribir esta nota, acudí al maestro Google para chequear los datos de esta pieza, y me topé con otra coincidencia, hoy este artista, que nació el 24 de Mayo de 1941, está celebrando su 70avo. cumpleaños.

Dylan es una de las figuras clave de la cultura del siglo XX. En la historia de la música popular hay un antes y un después de él. Su obra es poesía, misterio y máscara.

Sobre todo esta canción, que en los ’60 se convirtió en un himno a las interrogantes de un destino que ya llegó, hoy me volvió a ayudar a acercarme a las complejas relaciones con la memoria, la justicia y con las preguntas sin respuestas.

No ha sido fácil convivir con situaciones que jamás entenderemos.

No es fácil deslindar al artista de su vida privada.

Así fue Pilín, mi hermano.

Su vida, muchas veces atormentada, nos dejó en su camino logros y suspensos.

Pilín fue un artista talentoso, batallador, inquieto, angustiado y productivo.

Un creador que se fue, dejándonos sus hijos Felipe, Ernesto y Adela y sus obras cinematográficas.

Su legado lo hace inolvidable.

En su memoria, continúo tarareando a Dylan, buscando repasar nuestras vidas, con amor y dolor. Con tolerancia y comprensión.

Es en estas ocasiones cuando nos toca hacer el camino al revés.

Hoy trato de volver al punto de partida, de convertir a la meta en origen para encontrar la verdad allí, donde el viaje empezó.

Quizás así, sin ir más rápido que el río, en el camino, entenderé qué sucedió.

Como leí en ‘El alfabeto de los pájaros’ de Nuria Barrios: “La vida solo puede entenderse viendo hacia atrás,… pero hay que vivirla viendo hacia delante”

Porque tarde o temprano, todos tendremos que partir.

jueves, 19 de mayo de 2011

Duelo por nuestros Museos


(Viñeta: avatar en twitter de Rogelio Chovet)


En 1951, la UNESCO y el ICOM (Consejo Internacional de Museos) iniciaron una campaña de información sobre la importancia de los museos, con el propósito de crear conciencia del relevante papel que estas instituciones cumplen en la sociedad.

En el año 1977, durante la XII Conferencia General del ICOM en Leningrado, considerando aquella iniciativa, fue instaurado el 18 de mayo como Día Internacional de los Museos, una fecha significativa en la cual las naciones se unen en una suerte de fiesta de los museos.

Es así como mañana, 18 de mayo, los países llevarán a cabo eventos especiales para fortalecer, enriquecer y celebrar no solo a las instituciones museísticas sino a sus colecciones y a sus profesionales.

Esto es, por supuesto, en los países que respetan su patrimonio, cultivan sus aportes y velan por el futuro cultural de las generaciones.

¿Qué pasará en Venezuela? No es difícil imaginar el panorama.

Con un aparato ministerial que ha apostado a la destrucción de la institucionalidad cultural. Con unos funcionarios supuestamente rectores de la cultura “popular”, que lo que los caracteriza es la ineficacia , la desidia, la corrupción y el jalabolismo, ¡que se van a ocupar de la cultura y de las artes!

Al contrario, su misión ha sido cerrar museos, ahogar sus presupuestos, minimizar la labor de los profesionales, abandonar las colecciones, desatender a los creadores y cerrar sus puertas a la comunidad.

Entre las consecuencias de esta deplorable y crítica situación podemos señalar: la centralización univocal de las decisiones, el abandono de sus edificaciones, la desatención a su personal, y sobre todo la prelación del adoctrinamiento ideológico del régimen sobre los criterios artísticos.

¡Y pensar que en los `80, después de décadas de consecuente crecimiento y desarrollo, llegamos a ser para el mundo un ejemplo digno de estudio y emulación mostrando una consolidada red de instituciones museísticas, con presupuestos dignos, autonomía artística, programación amplia y actualizada, publicaciones documentadas, ilustradas y estupendamente diseñadas y, sobre todo, colecciones actualizadas, bien conservadas y exhibidas cumpliendo sus funciones didácticas y valorativas del trabajo de los artistas, investigadores, historiadores, científicos.

Para los venezolanos la visita a los museos era un acto cotidiano, habitual y festivo.

Mañana portaremos un lazo negro en señal de duelo .

Mañana será otro día de luto para nuestros museos.

¡No lo dudes Furruco!, la historia te lo cobrará.

miércoles, 11 de mayo de 2011

LOS ARTISTAS CONTRA LAS CUERDAS



Hoy es 10 de mayo, aniversario del nacimiento de Armando Reverón (1889-1954). En su memoria, este día fue consagrado como Día Nacional del Artista Plástico.

Lejos están las décadas cuando esta celebración se traducía, además del reconocimiento a su figura, en un apoyo real a los creadores visuales.

Fue una época cuando el arte venezolano recibió los mejores impulsos, en fomento a la creación, a la formación y la difusión, a los museos y a la promoción internacional. Era frecuente y exitosa la participación de nuestros artistas en las grandes Bienales y en los encuentros teóricos, en fin cuando el Estado se ocupaba de darle a sus creadores el espacio que merecen.

Lamentablemente, hoy, será un día con mayor sabor a funeral que a reconocimiento.

El sector cultural está desguarnecido, abandonado.

Sin embargo los artistas no dejan de crear y continúan dándonos el regalo del placer visual.

Sus reducidos ingresos los obligaban a sacrificar y comprometer su tiempo creativo en otras actividades para poder sobrevivir. Son pocos quienes pueden nivelarse al salario mínimo.

Ni hablar del financiamiento para la creación de su obra nueva o para experimentaciones. Lejos las convocatorias a salones y premios. Y más escasas aún, las oportunidades para la difusión de su obra, tanto nacional como internacionalmente.

Las iniciativas que existen subsisten a partir del riesgo de individualidades y de la gestión privada, lo cual limita su amplitud y alcance.

Cada vez que una institución cultural cierra sus puertas, no solo son sus empleados que quedan cesantes, son los artistas que caen en estado de precariedad, es el patrimonio que agoniza.

Sin creadores, quedaremos así, como sin agua y sin luz, careceremos de sus aportes indispensables .

Los artistas han pasado a ser un reglón prescindible de la sociedad, dejándonos huérfanos del alimento espiritual, que es tan necesario como el físico.

No queremos instituciones estériles y generaciones abandonadas. Esperamos que el Estado cumpla su función fundamental y ponga en práctica medidas que estimulen la libertad de creación, el fomento a la formación y difusión, la protección del patrimonio y las leyes efectivas que estimulen el mecenazgo.

Las autoridades del Estado son las responsables de la destrucción de nuestro presente cultural y de la hipoteca del futuro de los artistas visuales.

Cito a un artista catalán quien en una columna aparecida hace algunos meses y de cuyo título me apropié: “La cultura en general y el arte en particular, no son un lujo. Son una prioridad indispensable. El arte lo hacen los artistas”

*Daniel G. Andújar. Babelia, 12/2/11. El País.